A comienzos de 2020 el mundo entero se paró. De la forma más inesperada, como procedente de una película de acción de Hollywood, un virus extendió su manto siniestro por todo el planeta, dejando al descubierto esa fragilidad de la que no podemos escapar, aunque nos empeñemos a creer lo contrario. Sí, en 2020 se paró el tiempo y el mundo del deporte quedó congelado hasta que, ya finalizando el año, comenzó a recuperar el pulso. Celebramos el campeonato de España, un muy meritorio campeonato de España que reivindicó el coraje y el esfuerzo de un deporte que se negaban a dejar que sus sueños se marchitaran. Y en 2021 hemos continuado inmersos en este proceso de descongelación, de recuperación de una normalidad que esperemos concluya en 2022, y que recuperemos del todo nuestras viejos anhelos y aspiraciones, y que también hayamos aprendido algo de todo esto.
Yo, como fotógrafo deportivo, especializado en patinaje artístico, deseo que este sea el proceso que vivamos, y que yo sea capaz de inmortalizarlo. Espero que 2022 me dé la oportunidad de estar en el momento y lugar exactos para mostrar quiénes somos desde la óptica del patinaje sobre hielo. Cómo esta fractura en el tiempo nos ha hecho más fuertes, más conscientes de quienes somos, de nuestros límites, y más sabios. Estas y otras enseñanzas se encuentran ocultas en pequeños detalles, en inesperados instantes que asoman tímidamente en medio de un programa, cuando una patinadora recupera el aliento, en la mirada cómplice de unos entrenadores que han hecho magia para llegar a tiempo o en el abrazo final de una familia. Y yo espero estar ahí, cuando surjan, y ser capaz de hacer eternas esas décimas de segundo tras las cuales se oculta quiénes somos, cómo nos levantamos tras habernos caído, o la cara del sufrimiento que implican una elevación o un salto. Solo pido a 2022 que me deje estar cerca, con mi cámara en la mano, para tratar de descubrir a esos pequeños duendes, sabios exploradores del tiempo, encuadrarlos, y apretar el botón antes de que desaparezcan para siempre.
Jose Gallego